Michael Cull de 66 años ha sufrido mucho dolor durante una década, dejándolo incapaz de caminar y convirtiéndose en el blanco de burlas crueles. A pesar de los intentos por detener el crecimiento de su pierna, su condición empeoró dejando su pierna deforme y con bultos.
Actualmente el escoses tiene la pierna tan grande que ni siquiera puede subir a un avión, cocinar, bañarse o subir unas escaleras.
Afortunadamente podría tener una operación a cargo de un especialista de Inglaterra para terminar con esta pesadilla y tener una mejor calidad de vida. Michael dijo: “Estoy encantado de que todos estos años de dolor pueden llegar a su fin. Esto significará una gran cambio en mi vida, espero que las cosas vuelvan a la normalidad.”
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